Contagia la Huasteca alegría veracruzana.
* La región huasteca está conformada en Veracruz por los municipios de Tuxpan, Pánuco, Castillo de Teayo, Tamiahua y Chicontepec.
Xalapa, Ver., 25 de Noviembre de 2011.-Al ritmo del huapango, el violín, la jarana huasteca y la quinta huapanguera contagian de la alegría que la música y la región ofrecen a quienes visitan la Huasteca veracruzana.
En la región huasteca, la fiesta se acompaña con la rica gastronomía de la región, camarones, jaibas y ostiones, acompañados por espléndidos paisajes naturales, lagunas, esteros e islas.
En la Huasteca se viven con gran alegría, colorido, entusiasmo y tradición el carnaval, las fiestas y los eventos deportivos como la famosa regata Tajín.
Uno de los sitos emblemáticos de la región es la zona arqueológica del Castillo de Teayo, propia de la cultura huasteca que guarda la historia, costumbres y secretos de los aztecas, mexicas y toltecas.
La región huasteca está conformada en Veracruz por los municipios de Tuxpan, Pánuco, Castillo de Teayo, Tamiahua y Chicontepec.
Tuxpan
Ubicado a 306 kilómetros del puerto de Veracruz, es un sitio ideal para practicar deportes acuáticos en el río Tuxpan o pasear por los esteros de la zona y asolearse en sus tranquilas playas de cristalino mar.
Los paseantes podrán disfrutar de su rica comida regional y vivir sus festividades, entre las que destacan el carnaval en primavera, la regata Tajín en verano y la fiesta del Niño Perdido, iluminando toda la ciudad a la luz de millares de velas, así como el Festival de las Huastecas.
Castillo de Teayo
A 68 kilómetros de Tuxpan, Castillo de Teayo resguarda un enigmático sitio arqueológico que perteneció a la cultura huasteca que fue colonizada por los toltecas y más tarde por los aztecas.
La construcción prehispánica está compuesta con tres cuerpos supuestos en la base y escalinata; los tres cuerpos en declive que forman la pirámide son concéntricos y están separados por un pasillo lateral.
Pánuco
Ubicado al norte del estado, a 206 kilómetros de Tuxpan y a sólo 50 de Tampico, Pánuco, que en voz náhuatl significa “en el vado, paso del río o puente”, fue conquistada en 1522 por Hernán Cortés, quien estableció la Villa de Sebastián del Puerto, que más tarde se convertiría en alcaldía mayor.
Hoy, Pánuco es una importante población petrolera, ganadera, agrícola y pesquera. Durante todo el año se puede disfrutar de un paseo por el malecón de Agustín Lara o visitar la Casa de la Cultura que reúne importantes piezas arqueológicas huastecas y una evocadora colección fotográfica de la historia de la ciudad de Pánuco.
En esta zona se vive la tradición y contagiosa alegría veracruzana.
Chicontepec
A 130 kilómetros al oeste de Tuxpan, el llamado “Balcón de las Huastecas” colinda con el estado de Hidalgo, muy cerca se localiza el Postectitla, cerro formado por basalto gris azulado, lugar de gran relevancia en los rituales indígenas.
Los domingos son días de plaza. Los nahuas de las serranías cercanas bajan a vender carne seca, café en polvo, tabaco seco en horas, morrales, tiras con fino bordado, cestas y diversos productos agrícolas.
Los días 1 y 2 de noviembre se celebra Todos los Santos y Día de Muertos con rituales ancestrales en la Huasteca meridional.
Tamiahua
A 141 kilómetros de Tuxpan, Tamiahua es la región ideal para disfrutar de los deliciosos mariscos.
Es el lugar por donde arribaron en tiempos lejanos emigrantes de África. Hoy uno de los centros pesqueros más importantes del país, particularmente atractivo por sus exquisitos camarones, jaibas y ostiones preparados con las tradicionales y exquisitas recetas de los lugareños.
Además de su famosa laguna, esteros e islas, todo su entorno posee gran biodiversidad, por ejemplo, el paseo a Barra de Corazones, mar adentro, es una experiencia inolvidable por lo singular del paisaje en donde típicas embarcaciones navegan en profundas y cristalinas agua.
