HORA
LIBRE
Álvaro Belin Andrade
El
vergonzoso espectáculo de los 400 nudistas.
La insolencia de los dirigentes del
Movimiento de los 400 Pueblos no tiene límites; tampoco, autoridad estatal o
municipal con los suficientes argumentos para ponerlos en su lugar. Esta
vertiente de delincuencia social de la que han hecho gala en las últimas
semanas, primero en Misantla y, posteriormente, en Xalapa, está poniendo en
grave cuestionamiento a autoridades que, imposibilitadas para poner orden en
las vialidades urbanas del atroz espectáculo nudista de las huestes de los Del
Ángel, todavía se creen con la personalidad de imponer reglas de tránsito que
acusan tintes autoritarios al resto de los mortales.
Porque nadie, ni los más conspicuos
adoradores del vodevil ni los defensores a ultranza de los movimientos
populares, se sienten agradecidos con el vetusto César del Ángel Fuentes ni con
su rijoso heredero, el diputado Marco Antonio del Ángel Arroyo, por prodigar en
las calles céntricas de la ciudad el aromático y deplorable espectáculo de los
cuerpos desnudos de hombres y mujeres, menores de edad algunas de estas
últimas, con el inconfeso propósito de defender causas sociales que ni el
propio secretario de Gobierno Gerardo Buganza, encargado de encarar las alegres
encerronas con los líderes de la protesta, ha terminado por comprender.
¿Cuál es la causa que ha descarriado al antaño
hijo pródigo priista, Marco Antonio del Ángel, quien ayer se desató contra sus
propios colegas de bancada en el Congreso local, acusando a diestra y siniestra
del apoyo que han brindado en Misantla al alcalde de AVE, Efrén Meza, y del
encumbramiento de políticos como Edgar Spinoso, Jorge Carvallo y Gustavo Moreno
Ramos? ¿Por qué no los acusó, igualmente, de haber prestado las siglas para que
él llegara al Congreso sin representar apenas alguna opción política en el
Distrito de Misantla?
Su amenaza de llevar su espectáculo
circense frente al Congreso local, hecha justo el día en que entró en vigor la
ley que prohíbe el uso de animales en los circos, constituye el más flagrante
acto de autoritarismo y chantaje, luego de que diputados panistas acusaran al
movimiento de actuar fuera de la ley.
O Gerardo Buganza ha sido incompetente
para fraguar acuerdos con los Del Ángel o sus demandas tiran a la ilegalidad, o
la protesta está hecha para ocultar las acciones que tanto la PGR como la
Fiscalía General del Estado realizan a la sombra para investigar a funcionarios
estatales corruptos o para encarcelar a exalcaldes que metieron la mano en el
cajón durante sus administraciones.
Para todos los xalapeños, y no solo para
quienes acuden a la catedral a santiguarse, es verdaderamente ominoso el
espectáculo promovido por las mentes enfermas de padre e hijo, auxiliados por
su abogado Reynaldo Escobar Pérez. Y es que han llegado al desenfreno: si antes
se paseaban mostrando sus pectorales, hoy las mujeres (incluidas menores de
edad) han sido arrojadas al arroyo vehicular con apenas unas chanclas como
vestimenta, sin que el gobernador Javier Duarte de Ochoa haya pedido mesura a
una organización que, junto a Antorcha Campesina y el Partido Cardenista, le
han servido a él y a su partido como organizaciones parasociales, grupos de
choque que sirven para inhibir otras protestas o para distraer de los temas que
realmente preocupan a la ciudadanía.
Para colmo, la ciudad tiene un alcalde
omiso. En lugar de representar los intereses de los habitantes a los que
gobierna, Américo Zúñiga Martínez ha sido muy claro al señalar que no tiene
instrumentos jurídicos para contener la infame invasión de los 400 Pueblos,
como para plantearle que declare a la Plaza Lerdo como la Plancha Nudista de
Veracruz y, al menos, logre atraer turismo que cada año le quitan las playas a
la ciudad del arte y la cultura.
Ni las severas críticas que han aparecido
en los medios de comunicación han hecho que los Del Ángel recapaciten en el
enorme daño que siguen infringiendo a su propia organización, para la que todo
ciudadano que se precie constituye una representación de la barbarie, al
servicio de intereses personales de sus dirigentes.
De qué otra manera se puede catalogar a
una organización que sigue pidiendo cárcel para el exgobernador Patricio
Chirinos y su exsecretario general de Gobierno Miguel Ángel Yunes Linares por
haber hospedado por meses a César del Ángel en las dependencias del penal de
Pacho Viejo hace casi 12 años. Cuál es la razón para no sospechar que todo
esto, además de distractor, busca servir para que el cachorro, convertido en
diputado local priista, sea resarcido del terrible plantón que el PRI le ha
dado en la región, Misantla, en que quiere ser el fiel de la balanza, el
dictaminador de candidaturas y posiciones políticas.
Ya está bueno de dejar a la ciudadanía en
manos de estos rufianes, ya es hora de que se persiga judicialmente a misóginos
dirigentes que utilizan los cuerpos desnudos de mujeres para exigir beneficios
personales, que no tienen empacho en colocar al frente de sus encuerados a
jovencitas menores de edad, para llamar la atención de los paseantes mostrando
pechos, nalgas y genitales.
Saldan negociación y se
retiran
Después
de las 19:00 de ayer, la Secretaría de Gobierno emitió una breve nota en que se
anuncia el retiro de los 400 Pueblos:
“Después
de varias reuniones con la organización de los 400 Pueblos para analizar lo
relativo a la situación de los locatarios del mercado de Misantla y de las
bodegas de Tabamex, ubicadas en el municipio de Álamo, que le fueron entregadas
a la citada asociación, el secretario de Gobierno, Gerardo Buganza Salmerón, a
fin de actuar conforme a Derecho, ordenó la realización de una revisión
exhaustiva de la distribución y asignación de los locales comerciales que
conforman el mercado Antonio M. Quirasco,
de Misantla”.
Sea por
Dios y no venga más.