MUCHO RUIDO Y POCAS NUECES
Uriel Flores Aguayo
En las estadísticas internacionales nuestra democracia
vale el 19 % de aprecio en la sociedad, los partidos políticos ocupan el ultimo
lugar en la confianza de la gente, la credibilidad del gobierno y los legisladores
está por los suelos y el voto como fuente de gobierno se encuentra bastante
devaluado. En ese escenario no puede haber apego a leyes e instituciones, al
contrario, hay dudas y rechazo; por eso se eluden responsabilidades colectivas
y se mina la vida pública; digamos que la democracia no funciona y es muy
precario el estado de derecho.
Con esas estructuras de poder y con una clase política
de auto consumo casi todo es disfunciónal, casi nada puede funcionar
normalmente y se cierran vías de desarrollo. Es tan obvia esta situación, tan persistente y viciosa que
solo desde una gigantesca simulación, envuelta en cinismo, se puede negar o
apoyar. Estamos frente a una situación límite para enderezar el rumbo o para
hundirnos en la decadencia y desesperanza. Con estos personajes y las mismas
practicas no vamos a salir adelante.
Sin democracia real se excluye a los ciudadanos de la
información y las desiciones, se vive en círculos y prácticamente se pierde el
tiempo. La ingobernabilidad significa bache económico con desempleo, corrupción
absoluta e inseguridad; es origen de la impunidad y la violencia. Es curioso
que los que deberían dirigir a la sociedad sean omisos e irresponsables,
abandonando sus funciones y viendo solo por sus intereses. No pienso en una
democratización súbita pero si creo en un proceso real que surja de la voluntad
y la buena fe, del talento y la creatividad de los hombres y mujeres que toman
la iniciativa, que tienen valor y asumen compromisos concretos.
Ahora en Veracruz se vive una situación política
inédita, con un Gobierno estatal en problemas financieros y de credibilidad;
estamos ante el agotamiento y fin de una forma de gobernar que lleva casi once
años. La cúpula del poder local no asimila su situación y opta por los
enfrentamientos o negocia la retirada para esperar mejores tiempos. En la
capacidad y honestidad actual de unos cuantos está la tranquilidad de millones
de Veracruzanos, expectantes del resultado inminente de una coyuntura donde se
practica la acción política como choque y muy poco como idea sana de dirección.
Por supuesto que hay proyectos e intereses de por
medio, tal ves ciertos ideales también, pero incide mas la condición y calidad
humanas, donde pesan las ambiciones y los estilos autoritarios. De esas
condiciones surgen órdenes, estrategias y actos determinados. Hay venganzas y
soberbias en hechos sin brillo colectivo, solo para el ego y la reafirmación de
un vetusto principio de autoridad. Una ves que las ordenes excluyentes se
cumplen se convierten en bola de nieve, en inercia y en bando para una guerra.
La única manera de detener el inútil y desgastante
enfrentamiento político en curso en Veracruz, es por la presión externa y centralista
o por el talento de los protagonistas. Este último recurso es escaso, requiere
cabeza fría y humildad. Es algo complicado que surjan formulas democráticas de
trayectorias autoritarias, pero no se debe descartar un escenario de diálogo y
conciliación; hasta en cruentas guerras y dictaduras se han dado la oportunidad
de superar crisis y desencuentros brutales. No seria, por lo tanto, extraño que
en Veracruz, también se dieran un respiro los guerreros. De todos modos los
acuerdos deseables deben ser transparentes y útiles socialmente.
Todo está en cuestión en Veracruz, desde la democracia
y sus instituciones hasta la forma en que se incorporan los ciudadanos a la
vida pública. Dicen que después de la tormenta viene la calma; eso habría que esperar para nosotros,
para lo que hay que aumentar en calidad y cantidad la participación ciudadana
en los asuntos colectivos. Esto no es cuestión de personas en lo individual, es
de un sistema que debe cambiar sentido, prioridades y reglas. Salimos con
democracia plena o simplemente le damos la vuelta a nuestros problemas.
Ufa.1959@gmail.com
Recadito: Avanza la Promotora Ciudadana de Xalapa.