BUENA VOLUNTAD PARA XALAPA
Por Uriel Flores Aguayo
Xalapa Enríquez ver. 1 de
noviembre 2012 .-A pesar de que apenas en unos
días inicia formalmente el proceso
electoral del 2013 desde hace algunas semanas se anuncian y se habla de
candidatos y coaliciones para Xalapa; como siempre, la ley dice algo y la
realidad, otra. Basta mirar a las azoteas para encontrar los anuncios
espectaculares de quienes se
promueven o son promovidos para un cargo
de elección popular. Prácticamente todos los aspirantes o suspirantes
aplican el viejo manual: se posicionan con colorcitos, iniciales, fotos de
pretextos y, en general, con recursos públicos. Hasta hora dos o tres de los
prospectos han
hablado de sus propósitos y han intentado, con poco éxito, articular
algunas ideas; no pasan de generalidades, de lo tradicional y, si acaso, de una
muestra de voluntarismo. Opino:
El problema principal, la clave,
de Xalapa es de carácter político, tanto por su sistema de gobierno, como por
la falta de voluntad de ese nivel para resolver los demás problemas. Xalapa está
regida por un sistema clientelar en muchos sentidos y en muchos ámbitos, que
pervierte la función publica y coloca los intereses de grupo por encima del
interés general; para ilustrar esa realidad podemos hablar del transporte
publico, de la limpia, de los parques, de las cantinas , de las áreas verdes,
etc. Tenemos autoridades dependientes de una pirámide estatal, con facultades
disminuidas hasta parecer una especie de regencia y con poca voluntad política
para encarar nuestros problemas; casi todos los presidentes municipales que
hemos tenido han privilegiado su carrera política sobre el cumplimiento de su
deber. Por eso hablo de que se necesita voluntad política de las autoridades y
buena voluntad de los ciudadanos; lo que no nos ayuda es el simple
voluntarismo, del estilo de las personas que piensan que van a resolver algún
problema simplemente por que lo dicen ellas. En todo caso, para cambiar, hay
que concluir que ese sistema ya no da
para más, que debe ser sustituido por un conjunto de reglas que garanticen
derechos pero también den obligaciones.
De cara a la elección municipal
del año próximo en Xalapa, de las estrategias electorales que se pueden vislumbrar
la única clara es la oficial: decidir
desde ahora su candidatura para prepararla y reforzarla con todos sus recursos,
dividir a la oposición e inflar candidaturas que le puedan servir de comparsas,
control informativo respecto a los temas más relevantes de nuestro municipio y
estrategia nítida para no soltar el gobierno municipal. De lado de la oposición
no quedan claras sus posturas, sobresalen los conflictos de un lado y la sopa
de nombres del otro. Independientemente de los intereses y los cálculos
electorales de las fuerzas políticas se debe exigir desde la ciudadanía que se
coloquen en el debate público los principales problemas de nuestra ciudad, así como las propuestas de soluciones.
Xalapa,
requiere un proyecto propio, con identidad, por encima de la politiquería y los
negocios; desde la integración de las planillas que van ha formar el cabildo
debe buscarse calidad y representación, que no pase lo que actualmente sucede
en el cabildo xalapeño, que esta
integrado, en su mayoría, por burócratas
y personas desconocidas. Xalapa requiere un gobierno fuerte por lo
representativo, por sus cualidades y su autoridad. Este es un buen momento para
hablar en serio de nuestros problemas y para hacer sobresalir nuestras fortalezas.
Somos los xalapeños, de origen y adopción, los que tenemos que tomar las
riendas de nuestro presente y futuro. Reivindiquemos a nuestro municipio y garanticemos para todos
un buen nivel de calidad de vida. La clave esta en tener buena voluntad
ciudadana y voluntad política de las autoridades.
Recadito: pronto realizaremos en
Xalapa un foro sobre ciudades patrimonio
de México