Naolinco: festejos ancestrales.
* Es el lugar para ir y regresar a la tierra de Mictlantecuhtli.
* A 32 kilómetros de Xalapa, en Naolinco, la conmemoración del Día de Muertos constituye una verdadera celebración de devoción y tradición.
Xalapa, Ver., 29 de Octubre de 2011.-A sólo 32 kilómetros de Xalapa, en Naolinco, la conmemoración del Día de Muertos constituye una verdadera celebración de devoción y tradición, una visita obligada, a fines de octubre y principios de noviembre.
Se dice que por esos días el viento empieza a correr y anuncia la llegada de los muertos; la temperatura desciende y la neblina baja, dando un aire místico al paisaje.
Los preparativos inician antes del 28 de octubre, en medio de aromas de cempasúchil e incienso, de pan recién horneado, mole, tamales y otros deliciosos platillos, cuando se instalan los altares y se venden flores, fruta, dulces de jamoncillo y figuras de azúcar. Los días siguientes, se recuerda a los muertos de acuerdo con la forma en que fallecieron:
El 28 de octubre, a quienes murieron ahogados; el 29, a quienes fueron asesinados o murieron en un accidente; el 30, a los niños del “limbo”, quienes según la tradición católica murieron sin haber sido bautizados; el 31, a los niños. El 1 de noviembre, en que se recuerda a los adultos, inicia el ritual de La Cantada, cuando las familias dejan las puertas de sus casas abiertas para recibir a grupos de cantantes que recuerdan a los difuntos, y el 2 de noviembre, a los fieles difuntos o muertos mayores. Ese día es dedicado también a visitar el cementerio.
La Cantada en Naolinco
Uno de los mayores atractivos de este municipio es la tradicional “cantada o alabanza a los fieles difuntos”, que son coplas que los parientes hacen para recordar a personajes o miembros de la familia. En las casas ponen los altares con la comida favorita de sus difuntos, la gente deja abierta las puertas de su hogar a conocidos y extraños para que observen sus altares y, por qué no, también para unirse al canto que le preparan a los que se han ido. Es una tradición que año con año se lleva a cabo el 1 de noviembre. Los grupos de familias naolinqueñas salen al panteón, donde se entonan las coplas.
La Cantada inicia a partir de las ocho de la noche y termina en la madrugada del 2 de noviembre. Se puede llegar a mediodía del 1 de noviembre y probar la deliciosa gastronomía del lugar, además de una nieve de berenjena, típica de la temporada, visitar las catrinas que son colocadas en los callejones, negocios y casas y la muestra de altares monumentales y exposiciones plásticas alusivas al tema. Todo se conjuga de una manera única para hacer de Naolinco una visita imprescindible.
