Al Estilo Mathey
* Bien fríos
Por Gustavo Cadena Mathey
Buen día lector:
La atención nacional de millones de mexicanos que de una u otra forma nos interesamos en las cuestiones políticas, estuvo puesta la mañana de ayer en el anuncio que hizo el presidente electo Enrique Peña Nieto, de quienes integran su equipo de transición.
Conforme revisaron la lista, unos con inquietud, otros con verdadero nerviosismo, muchos con inevitable envidia, se percataron de que mientras los políticos defeños, los del Estado de México, los de Hidalgo, los del norte de la república suben como la espuma, los veracruzanos, otrora mandones de la,política nacional, hoy pasan a las oscuridades del limbo, a la espera de ser rescatados por algún amigo cercano a los hombres del presidente.
Atrás quedaron los tiempos de los presidentes Miguel Alemán Valdés y Adolfo Ruiz Cortines, de los Angel Carvajal Bernal, Jesús Reyes Heroles, Rafael Hernández Ochoa, Agustín Acosta Lagunes, Fernando Gutiérrez Barrios, Julio Patiño Rodríguez, Gustavo Carvajal Moreno, Luis Octavio Porte Petit, Ignacio Morales Lechuga y tantos y tantos veracruzanos que han puesto en alto el nombre de la patria chica en el altiplano.
Recuerdo aquella noche de diciembre de 1982 cuando se anunció el gabinete de Miguel de la Madrid; surgieron los nombres de Jesús Reyes Heroles, para la secretaría de Educación y Miguel Angel Gómez Ortega para la Marina; también se anunció como veracruzano xalapeño a un tal Marcelo Javelly Girard, para la secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología.
Al día siguiente, ni tardo ni perezoso me fui temprano al Registro Civil a buscar el antecedente. Efectivamente allí se hallaba el registro de un niño asentado en la capital con ese nombre. Resultó que lo de veracruzano fue solo el accidente de haber nacido en Xalapa, porque el papá que trabajaba ya no se en qué, en el Distrito Federal, solo venía de paseo a la ciudad y aquí se produjo el alumbramiento.
Tiempo después, Carlos Salinas incluyó a don Fernando Gutiérrez Barrios en Gobernación, a don Mauricio Scheleske Sánchez en Marina, a don Patricio Chirinos Calero en Desarrollo Social y un buen tramo a Ignacio Morales Lechuga, en la PGR.
Con Ernesto Zedillo fue bajando la presencia de los paisanos, a tal grado que en el gabinete solo incluyó de relevo a Miguel Limón Rojas en la SEP y creo que un tiempo en la SRA, además de Dante Delgado en la Procuraduría Agraria. Si bien el secretario de Marina José Ramón Lorenzo Franco era de Tlaxcala, estudió en la Naval de Antón Lizardo y respetó la posición en el gabinete para esa gloriosa escuela.
Vicente Fox tuvo al xalapeño Rafael Macedo de la Concha en la PGR y a Marco Antonio Peyrot en la secretaría de Marina
Felipe Calderón conservó la posición de los marinos para don Mariano Francisco Saynez Mendoza y al final al coatepecano Dionisio Pérez-Jácome Friscione y párele de contar.
Claro, la esperanza muere al último y eso lo dejó sentir el copetón al advertir malévolamente que este equipo que dio a conocer se encargará del proceso de transición y que los nombramientos no tienen que ver con las defiiniciones del próximo gabinete presidencial. Ajá.
Ahora no queda más que esperar a que crezcan nuestras fuerzas inferiores entre cuyos prospectos más alentadores podemos citar a los dos senadores por el tricolor y a algunos diputados federales.
Por cierto, al único que no se vio frío fue al gobernador Javier Duarte, pues tras la ceremonia del mensaje presidencial en palacio nacional fue entrevistado junto con los grandes hombres de la política, de los negocios y de la sociedad, por algunas televisoras del país en las que se le vio recibiendo el saludo de Calderón y en declaraciones tuvo el noble acierto de reconocer el trabajo del presidente saliente.
Que tenga un excelente día. ¡Sonría!
