* La firma del Acuerdo Integral para el Desarrollo Social Incluyente trae buenas noticias para los veracruzanos que más lo necesitan, afirmó.
* No al centralismo, todo con los gobernadores en el marco de un pacto federalista y democrático, absolutamente nada al margen de los gobiernos locales, enfatizó.
* No al centralismo, todo con los gobernadores en el marco de un pacto federalista y democrático, absolutamente nada al margen de los gobiernos locales, enfatizó.
En el marco de la Cruzada Nacional contra el Hambre,
convocada por el presidente Enrique Peña Nieto, y ante el gobernador
Javier Duarte de Ochoa e integrantes de su gabinete social, la
funcionaria federal dijo que se trata de un acuerdo histórico porque
retoma el federalismo al concentrar los esfuerzos de los tres órdenes de
gobierno, sus programas y sus acciones ahí donde más se necesita, donde
están los veracruzanos que enfrentan el reto de la pobreza extrema y el
hambre.
“La firma del Acuerdo Integral para el Desarrollo Social Incluyente
trae buenas noticias para Veracruz y para los veracruzanos que más lo
necesitan; ahí donde la pobreza es un reto para la cohesión del tejido
social y la gobernabilidad democrática, ahí donde la pobreza se traduce
en inseguridad y en desafío a las instituciones del estado”.
Agregó que este instrumento federalista convoca a la suma de
voluntades de los tres órdenes de gobierno para potenciar el impacto de
la política social y lograr resultados más eficaces en la lucha contra
la pobreza y la desigualdad.
Rosario Robles señaló que la pobreza está constituida por una serie
de fenómenos complejos y multidimensionales, ante los cuales ya no basta
el quehacer de un solo nivel de gobierno o de un solo programa.
“No al centralismo, pero tampoco a la dispersión que llevaba al país a
tener 32 políticas sociales, una para cada estado, y una política
social del gobierno federal, sin comunicación entre sí, sin sinergias,
instrumentándose de forma paralela, duplicando apoyos, compitiendo
muchas veces unas con otras.
“En un entorno de recursos fiscales escasos, estamos obligados a
gastar cada peso que nos confían los ciudadanos a través de sus
impuestos, con un enorme sentido de responsabilidad y con criterios de
eficacia”.
La responsable de la política social federal destacó que este acuerdo
es el puente para bajar la Cruzada Nacional contra el Hambre a nivel
territorial, recogiendo las prioridades de las autoridades locales y
alineándolas con la perspectiva estratégica del Gobierno de la
República, siendo así la base para una política social de estado, y
detalló que esta política social contará con un padrón único de
beneficiarios, con metas e indicadores precisos, y estará sustentada en
la transparencia y la rendición de cuentas.
“La instrucción es muy clara: todo con los gobernadores en el marco
de un pacto federalista y democrático que nos permita mover a México, a
sus estados, a sus regiones y municipios, a favor de la inclusión social
y la superación de la pobreza. Nada, absolutamente nada, al margen de
los gobiernos locales”.
La titular de la Sedesol dio a conocer que la Cruzada Nacional contra el Hambre
permitirá atender a 7. 4 millones de mexicanos en condición de pobreza
extrema y carencia alimentaria, y precisó que en la primera fase se
atenderá a 383 mil 606 beneficiarios que habitan en 33 municipios
veracruzanos. El resto de la población que requiere esta atención se irá
sumando paulatinamente”.
Estos apoyos llegarán lo mismo a municipios pequeños como a las
grandes ciudades; “entraremos a la capital del estado, al puerto de
Veracruz, a Coatzacoalcos, a Minatitlán y a las grandes zonas urbanas
con un claro objetivo: combatir la pobreza urbana”.
Señaló que así ha sido recomendado por las instancias competentes
como el Consejo Nacional para la Evaluación del Desarrollo Social
(Coneval), pues en estas zonas la pobreza se ha intensificado provocando
fenómenos perniciosos como la fractura del tejido comunitario,
violencia, adicciones, inseguridad. Y se requiere ahí de urgentes
intervenciones de política pública.
“Hoy se respira un entusiasmo renovado en México, después de un
prolongado tiempo de desánimo social y desesperanza. Vamos a impulsar
los cambios que México necesita, y lo vamos a hacer con la decidida
participación de los ciudadanos. Aquí estamos, en Veracruz, para unir
nuestro esfuerzo para mover a nuestro país”, y como lo dijo el
gobernador Javier Duarte, siempre hacia adelante, concluyó.
A su vez, el delegado de la Sedesol en Veracruz, Ranulfo Márquez
Hernández, informó que se han concertado acuerdos importantes con
Liconsa. En el municipio de Ozuluama, se rehabilitaron dos tanques para
la captación de leche fría con capacidad de 30 mil litros y se
integraron productores de lácteos en una cooperativa formada por 102
socios.
También se logró concretar el acuerdo para que la leche que se
consume en el Programa de Estancias Infantiles se compre a Liconsa. Se
proyectó y se firmará en breve un convenio con el DIF para que puedan
adquirir dos millones 200 mil bricks de 250 mililitros, los
cuales serán repartidos entre la población infantil en los 33 municipios
veracruzanos que están dentro de la Cruzada Nacional contra el Hambre.
Diconsa elevó el número de productores del estado en el catálogo de
proveedores con productos como frijol, café, mole, azúcar, piña, mango,
chile, champiñón, entre otros, y está por realizarse un acuerdo con la
Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (Sedarpa) para la
adquisición de 50 mil toneladas de maíz, cuatro mil toneladas de arroz;
dos mil toneladas de frijol negro y 400 mil toneladas de azúcar para
abasto nacional.