Blanca y José, ejemplo de vida y amor de la tercera edad.

* Se conocieron en La Quinta de las Rosas, donde disfrutan su tiempo entre danzón y deporte.

Xalapa, Ver., 27 de Agosto de 2011.-Blanca tiene 84 años de edad y José, 90. Están por cumplir un año de novios. Todos los días se ven en la Quinta de las Rosas, del DIF estatal, en donde bailan danzón, juegan basquetbol y conviven con otros adultos mayores que, al igual que ellos, disfrutan de su tiempo haciendo y aprendiendo lo que les gusta.

Para cada etapa de la vida no hay tiempo que desperdiciar, sólo hay un momento de vivir, considera Blanca Landa. “Estoy muy contenta en la Quinta de las Rosas porque he vivido experiencias que me faltaron vivir en la juventud, por eso estoy muy satisfecha” expresa.

No es una historia de amor cualquiera, es la que consideran la última etapa de su vida, que quieren disfrutar al máximo y en compañía.

A Blanca le gusta el deporte. Cuenta que de joven no lo pudo practicar porque su familia carecía de recursos económicos y no podía comprar zapatos adecuados, así que no pudo hacerlo. “Cuando llegué a la Quinta, jugué lo que me gusta: básquet. Tuve la satisfacción, incluso, de participar en una mini olimpiada y ganamos el segundo lugar; nos dieron hasta medalla por ello. Ésta es la etapa de mi vida en la que estoy satisfecha de estos logros”.

Aunque ahora es una de las mejores bailadoras en el grupo de la Quinta de las Rosas, a Blanca, cuando joven, no le gustaba el baile. “Pero ahora me encanta el danzón” expresa con notoria alegría. “Me gusta leer; no puedo hacerlo mucho, pero me gusta oír la lectura y todo eso hago en esta casa de recreo. Y gracias a la vida porque me encontré una pareja que llena lo poco o mucho que me falta vivir”.

A pesar de sus 90 años de edad, José Fragoso vive con gran lucidez. Escucha bien, se siente sano y principalmente enamorado. Por eso piensa que éste es el momento más feliz de su vida. “Tengo muy poco tiempo de que empecé a ir a la Quinta, pero me siento muy feliz porque ahí encontré a mi pareja y me ha hecho muy feliz” cuenta.

Hace un año y medio, José enviudó y sus hijos le platicaron de la Quinta de las Rosas. “Les doy las gracias. Estoy muy feliz porque así conocí a mi pareja y somos muy felices. Vamos a cumplir casi un año juntos. Cada quién vive en su casa, pero siempre nos vemos en la Quinta”, cuenta con emoción.

Blanca y José dicen que otras personas pueden rehacer su vida sin importar la edad. “Tengan en mente lo que no hemos hecho. Es la última etapa que nos queda y hay que vivirla feliz, plenamente” dijo Blanca.

Ellos están viviendo al máximo la vida. “No se necesita ni mucho dinero, ni estar muy sano, nada más la intención de estar bien. Es lo que yo aconsejo a la juventud, que en cada etapa de su vida aproveche el tiempo”.

Cada uno tiene hijos. José vive solo; Blanca, con su hijo, y cuando José los visita en su casa, siempre lo reciben con mucha amabilidad.

Ambos agradecen al DIF estatal “por la casa de recreo que tenemos. Siempre ofrecen apoyos para nosotros, porque ocuparse de una persona mayor para nosotros es una lotería y para el gobernador Javier Duarte y su esposa Karime Macías de Duarte, un don de respeto para la tercera edad. Ya nosotros estamos casi en la cuarta” concluye José.

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